El cáncer de pulmón se produce cuando hay un crecimiento exagerado de las células malignas en este órgano.
Es una de las patologías más frecuentes en el campo de la patología respiratoria y supone aproximadamente 1 millón de muertes al año en todo el mundo. Siendo la primera causa de muerte por cáncer en los hombres y la tercera en las mujeres.
En contraste con lo que sucede a los hombres, en los que ha disminuido la mortalidad por cáncer de pulmón en los últimos años, el cáncer de pulmón en mujeres ha aumentado en consonancia con el número de fumadoras.
¿Qué causas se asocian a la aparición del cáncer de pulmón?
El tabaco es la principal causa, los fumadores tienen un riesgo 20 veces mayor que las personas que no han fumado nunca de desarrollar esta patología.
Otras causas son: la predisposición genética, exposición a sustancias cancerígenas como el amianto y derivados del petróleo, la contaminación del aire y el consumo de marihuana.
El cáncer de pulmón en no fumadores es infrecuente y aunque su incidencia está aumentando, sus causas no se conocen todavía.
¿Cuáles son los síntomas del cáncer de pulmón?
El cáncer de pulmón es muy traicionero puesto que los síntomas aparecen en dos tercios de la población cuando ya se trata de un estado avanzado con metástasis.
Sin embargo, hay que estar muy atentos en los pacientes fumadores o exfumadores que presenten síntomas como el cansancio, pérdida de apetito o de peso, tos seca, expectoración persistente, tos con sangra, dificultad para respirar (disnea) y dolor torácico.
¿Cómo diagnosticarlo?
Lo más importante es acudir a un neumólogo para que valore al paciente y pueda decidir la mejor prueba.
En algunos pacientes asintomáticos el cáncer se detecta mediante una radiografía de tórax, pero normalmente se precisa de otras pruebas como el TAC-
Recientemente se ha demostrado que la vigilancia de los pacientes con riesgo alto de cáncer de pulmón se puede beneficiar del seguimiento por el médico neumólogo o la realización de TAC de baja radiación. Si se detecta en fase precoz el tumor se ha visto que aumente el pronóstico de vida y la supervivencia.
¿Qué hacer para prevenir el cáncer de pulmón?
La mejor estrategia para prevenirlo es evitar el consumo de tabaco. También se debe evitar respirar combustión de humos o ambientes tóxicos. Evitar lugares con elevada contaminación o polución ambiental es importante. Por último, mantener hábitos saludables con alimentación sana y rica en verduras y frutas puede evitar la oxidación y aparición de radicales libres relacionados con la mutación tumoral.